Las circunstancias críticas que está viviendo hoy España nunca habrían llegado a producirse si una parte de la prensa “nacional”, siguiendo órdenes extranjeras, no hubiera estado cuarenta años promoviendo la leyenda negra y el odio anti-español.
Desde la Transición, este papel fue cumplido por el masónico Grupo Prisa, propiedad de la familia Polanco y cuyo hombre fuerte era Juan Luis Cebrián, el hombre del Club Bilderberg en España durante los últimos 40 años. Otro papel muy importante en esta propaganda anti-española lo ha tenido el mal llamado “cine español”, otra de las principales herramientas para promover la destrucción (“deconstrucción” según el lenguaje marxista cultural) de la sociedad española.
Pero al llegar Zapatero al poder en el año 2004 el papel anti-español de los medios se radicaliza. En concreto, con la creación de dos nuevas televisiones: La Cuatro y La Sexta (en este último caso habría que sumarle el diario Público)
la Sexta es la televisión de Geoge Soros en España. Su hombre fuerte se llama Jaume Roures (el “Soros” español) un multimillonario marxista anti-español que en su momento fue sancionado por realizar videos de propaganda electoral para los proetarras de Herri Batasuna.
Por su parte, La Cuatro, junto al resto del grupo PRISA, fue adquirida por el fondo de inversión anglosionista Liberty AHC, propiedad del millonario Nicolás Berggruen, que dio un giro pro-israelí a la linea editorial del diario El País, también propiedad del grupo PRISA.
La Cuatro se ha unido a Tele-5 (Mediaset) y La Sexta a Antena 3, formando un duopolio que prácticamente controla toda la oferta y publicidad televisivas. Antena 3 y Tele-5 han tomado un perfil bajo en política aunque también nos inyectan su veneno progre-izquierdista-masónico en programas como los de Susana Griso y Ana Rosa Quintana. Su línea es más ideológica que política y utilizan las series de televisión y los programas para deformar ideológicamente a la población española. En especial Tele-5, plataforma oficial del lobby LGTB y que, a través de series como La Que Se Avecina inyecta su marxismo cultural anti-español y anti-cristiano en toda España.
Pero el principal daño lo hacen La Sexta y La Cuatro, en especial sus principales programas políticos: Al Rojo Vivo, de Antonio García Ferreras y Las Mañanas de Cuatro, de Javier Ruiz. Ambos programas y ambas televisiones han sido las principales promotoras del doble golpe de Estado que ha sufrido España en los últimos años: el golpe de Estado de 2011, a través del cual se llevó a un partido de ultraizquierda, batasuno y anti-español como Podemos al Parlamento nacional y el actual golpe de Estado separatista, en el que La Sexta y la Cuatro han sido sus mayores impulsores en España, dando cobertura constante a todos los golpistas separatistas y sus compañeros de viaje de ultraizquierda.
En paralelo, aparte de la balcanización y el desmembramiento de España, han estado defendiendo toda la agenda marxista cultural: agenda LGTB, ideología de género, odio anti-cristiano, fronteras abiertas a la inmigración en masa y a los falsos “refugiados”, islamización radical, ley de memoria histórica o “de odio anti-español”, etc, etc
Ya es hora de que el pueblo español empiece a reaccionar contra esta anomalía ¿qué pueblo permite que sus peores enemigos se hagan con sus medios de comunicación?¿por qué multimillonarios como Soros, Roures y Berggruen promueven la destrucción de España? ¡¡reaccionemos ya!!
No perdais de vista el MVT de La sexta o secta con sus patrocinadores de Acnur e invitados aparentemente plurales pero todos de falsa izquierda, porque me niego a llamar izquierda ni extrema siquiera a ese mejunje de ideas incoherentes pero muy bien pagadas, eso de izquierdas no tiene nada, tal y como los movimientos patriotas tienen poco o más bien nada de derechas la falsa izquierda tiene poco de izquierdas, ellos son la extrema derecha del capital disfrazados de humanismo y financiados por la banca, todos los periodistas y salvese quien pueda estan a su servicio el de la extrema derecha capitalista o banca mundial.
Me gustaria ver la gente que trabaja en dichos medios que contratos tienen y no me refiero a los periodistas muy bien pagados sino al currele normal, etts, subcontratas como si lo viera pero eso si somos muy de izquierdas y defendemos el pais de la piruleta.
Y de paso en nuestros ratos libres nos vamos a las sedes de los bancos a formarnos en diversas materias que a cualquier persona normal les costaria una pasta y hacer seminarios, asistir a eventos a que nos den la charla de que somos los mejores y más guapos del mundo. Para izquierdas La Falange y DN.