La Asociación Europa Terra Nostra, aliada del movimiento europeo APF (Alianza por la Paz y la Libertad) del que DN forma parte, publica en su web un reportaje sobre el proceso del caso Blanquerna, en el que está encausado el Secretario General de Democracia Nacional, Pedro Chaparro. El reportaje se puede leer AQUÍ (en inglés), aunque publicamos en esta entrada la traducción del mismo:
Parece que nada es sagrado para las instituciones actuales de ningún país europeo. Ni siquiera cuando los patriotas de libre pensamiento se levantan contra el separatismo y alzan sus voces para defender la unidad nacional contra aquellos que desean destruirla. El famoso «caso Blanquerna» es uno de los procesos judiciales en España en el que se lleva a cabo una evidente persecución del sistema de justicia español contra catorce patriotas. El caso Blanquerna tuvo lugar en 2013 en la sede del movimiento independentista de Cataluña en Madrid, en el Centro Cultural Blanquerna.
El 11 de septiembre de 2013, los separatistas organizaron una reunión en Blanquerna, a la que asistieron varios diputados nacionales de los movimientos separatistas vasco y catalán. La reunión separatista fue interrumpida por los contra-manifestantes, incluidos Pedro Chaparro, el actual líder de Democracia Nacional y Manuel Andrino Lobo (La Falange), para interrumpir el evento coreando el lema «No nos engañan: Cataluña es España»
Después de la protesta anti-separatista, se inició un proceso judicial contra los nacionalistas españoles que dura hasta nuestros días. Esta batalla legal de siete años, parece que se va a acabar en los próximos meses. En el primer juicio, los patriotas fueron condenados a 8 meses de prisión, tras la denuncia que presentaron los abogados de los independentistas. En 2017 fue el Tribunal Supremo el que los condenó a 4 años de prisión.
Afortunadamente, gracias al trabajo del equipo legal que representa a los patriotas españoles y a la presión que surgió de las protestas en las calles, nuestros camaradas lograron apelar el proceso con éxito y pudieron evitar el encarcelamiento. Sin embargo, el proceso está a la espera de una resolución inminente por parte del Tribunal Supremo español, que en cumplimiento de la orden del Tribunal Constitucional debe decretar una nueva sentencia.
Es de destacar que el gobierno español es cómplice de los separatistas que siguen desafiando y poniendo en peligro la soberanía española, ya que cedió ante Carles Puigdemont, una de las figuras más prominentes del movimiento separatista catalán y al que, para evitar ser juzgado, se le permitió escapar al exilio. Puigdemont está haciendo campaña para que la UE le dé apoyo para su causa separatista. Además de los separatistas conocidos, las organizaciones masónicas y sus miembros también defienden activamente la ruptura de España, utilizan los medios de comunicación y promueven el odio hacia los españoles que están haciendo todo lo posible para mantener a España unida.
Afortunadamente, hay un grupo que todavía está en pie para luchar, cuyo pulso no tembló a la hora de defender la unidad de su país. La justicia puede ser ciega, pero si ella también está sorda a la llamada de los patriotas, aún está por verse.
Pedro Chaparro
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