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Rajoy estuvo en China hace unas semanas para entregar los puertos de España a la dictadura asiática

Dos acontecimientos ocurridos durante las últimas semanas muestran que el desguace nacional que empezó en España hace 40 años continúa imparable. Mientras que los defensores del Régimen-78 recuerdan sin descanso el aniversario de las primeras elecciones democráticas que se celebraron en España y que llevaron al partido del nefasto Adolfo Suárez al poder, nosotros preferimos recordar sus consecuencias. No vamos a hacer el listado de todas las privatizaciones que convirtieron monopolios públicos en oligopolios privados, de todas las desregulaciones laborales, de la destrucción de la agricultura, ganadería, pesca y gran industria españolas, del desmantelamiento de nuestra capacidad nuclear, etc porque haría falta un libro entero.

Nos vamos a centrar en los dos últimos ataques a nuestra soberanía económica. En primer lugar, parece que la llamada «crisis de los estibadores» escondía una realidad aún más terrorífica. No se trataba solo de acabar con uno de los colectivos laborales que aún disfrutaba de condiciones laborales y salariales dignas sino que había una intención oculta: entregar los puertos de España a China. Ahora entendemos el viaje que Rajoy, el «defensor de la soberanía nacional», hizo a China durante la crisis de los estibadores. Parece que estamos ante una gigantesca cortina de humo para que los españoles no descubran el pastel. China está en plena expansión económica y está abriendo todo tipo de rutas comerciales para exportar en masa sus productos por todo el mundo. Ya se ha hecho con varios puertos en Grecia y en el Adriático y ahora va a por España. Quieren los chinos meternos en masa toda su producción sin que nadie les ponga ninguna traba. Y por supuesto, los estibadores españoles serán gradualmente sustituidos por chinos, filipinos y demás ¿vamos a permitir que el país que ha devastado nuestra industria y nuestro pequeño comercio a través de la competencia desleal a gran escala se haga con nuestros puertos? Y los liberales, tan «patriotas» y tanto que han atacado a los estibadores en nombre del «libre mercado» ¿no tiene nada que decir cuando nuestros puertos son entregados a un Estado extranjero?

En segundo lugar, hemos visto cómo se ha forzado la caída del Banco Popular para entregárselo al Banco Santander. Nos dicen que el Popular estaba pasando un mal momento por diversas circunstancias. Nos dicen que se había expuesto en exceso al ladrillo durante la burbuja inmobiliaria, algo que no es ninguna novedad pues todos los bancos y cajas de ahorros lo hicieron. Aquí llama la atención la diferencia de trato. Las cajas fueron rescatadas con dinero público y luego entregadas a la banca privada mientras que al resto de los bancos privados se les ha permitido incluir en su contabilidad a todo el exceso de ladrillo…pero a precio de venta, no al precio real una vez estallada la burbuja. Una trampa contable que les permite dar una imagen de viabilidad económica ¿por qué no se ha hecho nada de esto con el Popular? durante la crisis financiera de 2007, los Estados y los Bancos Centrales encontraron cientos de miles de millones de dólares para salvar a los bancos y hemos visto actuaciones parecidas del BCE con el Deutsche Bank alemán y el Monte di Paschi italiano ¿por qué el diferente trato con el Popular español?

botin guindos

Ana Botín, presidenta del Santander y Luis de Guindos, el hombre de Lehman Brothers en España

El Popular pasó los test estrés del mismo BCE hace un año, fue auditado, miembros del gobierno español aseguraban su solvencia poco antes de su caída…¿qué ha pasado? pues lo que está pasando desde hace 40 años. Sigue imparable la concentración bancaria en España. Ya han terminado con la banca pública y ahora hay que acabar con la banca privada no controlada y con una importante presencia católica, como el Popular, para que no le haga la competencia a la banca masónica anglosionista del Santander, un banco «español» que de español sólo tiene el nombre, pues no es más que el testaferro en España de la banca internacional sionista, esa que organiza anualmente la reunión del Club Bilderberg, reunión que este año juntó a Luis de Guindos y a Ana Botín, que es allí donde cerraron el acuerdo.

La supuesta «falta de liquidez» del Popular ha sido inducida a través de un ataque especulativo a la baja y de la retirada masiva de depósitos realizada por sus principales clientes, algunos de ellos el propio gobierno español y varias comunidades autónomas ¿falta de liquidez? como todos los bancos cuando dan más préstamos que el dinero que realmente tienen en depósitos, pero eso siempre se resuelve con la ayuda de otros bancos de fuera, ya sean privados o el mismo BCE. Pero en esta ocasión no se ha hecho nada sino que se ha dejado caer el banco a propósito ¿para qué? para lo de siempre: más concentración bancaria que, junto a la soberanía monetaria entregada al BCE, deja a toda España totalmente vendida a un pequeño puñado de banqueros sin escrúpulos.

Pero no pasa nada ¡¡celebremos los 40 años de la «democracia» y la grandiosa Constitución que nos han dejado sin absolutamente nada!! El anglosionismo financiero y China tienen a España en el bolsillo. Les debemos una cantidad gigantesca de deuda pública que jamás les vamos a poder devolver y se van cobrar en bancos (unos) y en puertos (otros) A eso añadamos la entrega al islam de toda España, una España que en 4-5 generaciones será musulmana por culpa de este criminal, traidor y masónico Régimen-78.

Pero nada. Sigamos dando las gracias a Suárez, Juan Carlos, González, Carrillo, Cebrián, Pujol, Fraga y demás «padres de la patria» que nos han traído este panorama tan prometedor.

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