Este es el rapero al que toda la extrema izquierda defendió «porque le condenaban por hacer canciones» y «por criticar a la Monarquía». Como se ve en la imagen, se le condena por incitar directamente al terrorismo y al asesinato. No solo anima a «matar a un puto Guardia Civil» sino que también les dice a sus seguidores «y poned una puta bomba al fiscal».

No es nuevo. Los grupos musicales separatistas y de extrema izquierda llevan décadas haciendo canciones ultra-violentas animando al asesinato de sus rivales políticos y a cometer todo tipo de actos violentos y terroristas en las calles. Exactamente igual que sus carteles y su propaganda. Durante décadas les salió gratis y se pensaban que esa impunidad iba a ser eterna. Irónicamente, ha sido justamente con la implantación de las «leyes contra el odio», impulsadas en un principio por grupos sionistas e izquierdistas para silenciar a sus oponentes Nacionalistas, cuando estas leyes se les han vuelto parcialmente en contra. Decimos «parcialmente» porque la inmensa mayoría de los ultraizquierdistas que son juzgados por este tipo de delitos acaban sin condena, como en el caso de la twittera Cassandra, a pesar de haber hecho llamamientos explícitos violentos. Pero en el caso de este miserable la incitación al asesinato es tan directa que de momento parece que no se va a ir de rositas. Habrá que vigilar que la basura como el tal Valtonyc o su amigo Pablo Hasel cumplan de verdad toda la pena que se merecen.