El Banco Central Europeo (BCE) crea, inventa o fabrica, de la nada, 80.000 millones de euros todos los meses. Ni tan siquiera necesita imprimir billetes. Unas anotaciones en cuenta son suficientes. Todo se reduce a que la institución compra deuda de los distintos países del euro por ese importe para apuntalar las economías. Puede parecer complejo, pero es simple. Galbraith ya lo explicó en su momento: «El proceso por el que los bancos crean dinero es tan sencillo que repele a la inteligencia». Hoy, el Consejo de Gobierno del BCE, presidido por Christine Lagarde debate en Fráncfort si empieza el largo, complicado y desconocido proceso de reducir la creación de dinero. Técnicamente se denomina «tapering» en la jerga anglosajona de las finanzas y los negocios, algo así como cerrar el grifo.

Leer noticia completa AQUÍ

Nota de DN: Más allá de las catastróficas consecuencias que puede tener para España una subida de los tipos de interés y que el el BCE deje de inyectar dinero en nuestra economía, lo realmente interesante del artículo es que muestra de una manera bastante clara cómo funciona el BCE, y lo hace con el timo que llevemos denunciando en DN desde hace décadas: imprimiendo dinero de la nada más absoluta y luego prestando ese dinero a los Estados como si fuera dinero real y, de hecho, la deuda que se crea es muy real y todos los miles de millones que recortamos en sanidad y servicios sociales y todas las millones de horas que hemos de trabajar para pagar esa deuda también son muy reales. Llevamos así casi diez años y en ese tiempo nuestra deuda con el BCE a través de este mecanismo tan perverso ha aumentado en cientos de miles de millones de euros. En ese caso, ¿por qué no creamos un Banco Nacional de España que imprima su propio dinero SIN DEUDA? es la única solución. O recuperamos nuestra soberanía monetaria de manera inmediata o España morirá por la deuda.

deuda