Por tanto:

1.- La inmigración en España no está relacionada con el mercado de trabajo, puesto que el paro ha estado siempre por encima del 20%. Parece haber una mayor relación con el mercado de trabajo en los sudamericanos. No, desde luego, en los rumanos, nación con un 7,15% de paro.

2.- Se trata, en buena medida, de una inmigración subvencionada, como lo demuestra el hecho de que España paga cien mil pensiones no contributivas a extranjeros.

3.- Es un proceso de islamización promovido por los poderes públicos, por cuanto las poblaciones demográficamente expansivas son la marroquí, la argelina y la nigeriana; las dos primeras totalmente musulmanes, y la tercera, en buena parte.

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