Los consulados españoles en Hispanoamérica y en aquellos lugares con presencia masiva de hispanoamericanos, como Miami y otros estados del sur de los Estados Unidos, están acelerando el plan de nacionalizaciones de los nietos de españoles, según recoge la ley dictada por el gobierno de Pedro Sánchez.

Pero estas nacionalizaciones masivas esconden una trampa en su letra pequeña, reconocen como descendientes españoles aquellos abuelos que hubiesen nacido fuera de España y que ostentasen la nacionalidad española por inscripción de sus padres, los bisabuelo. De tal manera, al ser el abuelo un bebé nacido fuera de España se consideran nietos de españoles a los biznietos de los verdaderos españoles que emigraron.

Para más inri, basta con que sus padres actuales (los verdaderos nietos de los que emigraron) hayan presentado la solicitud de nacionalidad ante el consulado correspondiente, para que sus hijos (los biznietos) puedan presentar su solicitud de manera separada y tramitada de manera independiente.

Otra vía para meter en España a cientos de miles de hispanoamericanos sin arraigo ninguno con España y con apenas unas gotas de sangre española corriendo por sus venas.

Luis Mateos (Secretario de Organización de Democracia Nacional)