El pasado miércoles 21 de Setiembre una familia británica fue brutalmente atacada y robada mientras estaba de vacaciones en Ibiza. El hurto desencadenó una pelea entre británicos y senegaleses que tuvo lugar esta en la zona de bares conocida como «West End», en Sant Antoni. Esta brutal agresión apenas ha tenido eco en los medios españoles.
Según ha explicó la Guardia Civil en su comunicado, la pelea comenzó cuando varios turistas británicos que se encontraban en una de las calles de la zona sufrieron el asalto de varias personas que se abalanzaron contra ellos, arrancándole a una de las víctimas una cadena y un anillo de oro.
Para ello, emplearon cuchillos y botellas de vidrio rotas, causando a tres de los agredidos diversas lesiones por las que tuvieron que ser atendidos en el centro médico de Sant Antoni.
Tres miembros de la familia, todos hombres, fueron heridos y necesitaron acudir al hospital. El padre tenía 52 años y dos hijos gemelos 25, según recogió el Daily Mail.
La Guardia Civil y la Policía Local de Sant Antoni detuvieron el mismo día a dos varones de origen senegalés por los presuntos delitos de robo con violencia y lesiones con arma blanca.
Uno de los presentes en el momento de la pelea grabó un vídeo que más tarde subió a Youtube. De esta forma, los agentes pudieron comprobar la agresión sufrida por los turistas e identificaron a los atacantes, que fueron localizados, detenidos y puestos a disposición judicial.
La Asociación de Senegaleses se desvincula del robo
. «La culpa no es de la comunidad senegalesa, sino de algunos senegaleses en concreto», remarcó un portavoz de la asociación, que dijo tener intención de reunirse con los responsables de la Policía Local de Sant Antoni con el fin de colaborar en la resolución del robo.
Se da la paradoja que el turismo es una de las principales fuentes de ingresos de nuestro país dada la situación de inseguridad de nuestros vecinos del sur pero desde DN nos tememos que si no se adoptan medidas contra esta inmigración salvaje y descontrolada esta será una fuente que también se secará para nosotros. No es una cuestión de poca importancia pues dada la frecuencia de estos hechos nuestro país empieza ya a gozar de fama de poco seguro para nuestros vecinos del norte que buscan en el un refugio vacacional.
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