TRUMP VAPULEA A CLINTON EN EL SEGUNDO DEBATE TELEVISADO

Luis Zapater

Donald-Trump-Hillary-Clinton-679304

Gracias a la diferencia de horario con España aquí en Iberoamérica, he podido ver en directo el segundo debate Clinton-Trump, y ha valido la pena. Tras la bomba que supuso en la opinión pública, -y sobre todo en el partido Republicano estadounidense- la revelación de las desagradables expresiones de Trump sobre una mujer casada en particular, y sobre las mujeres en general, un Trump acorralado ha sabido contragolpear aprovechando el exceso de confianza de la Clinton con el que ésta afrontó el segundo debate, y ella ha salido bastante malparada.

Desde el principio, tanto Clinton como Trump trataron de atraer a los indecisos al debate, pero en líneas generales éste último ganó porque logró pintar a Hillary Clinton como una política tradicional que habla mucho y después no hace nada, -y lo que es peor para ella-, pudo sacar a relucir sus contradicciones, sus ilegalidades y su hipocresía.

Como era de esperar, interrogado Trump sobre sus declaraciones sobre las féminas grabadas hace diez años en un autobús, tras volver a aclarar el tema y disculparse, tuvo que afrontar que Hillary volvía a la carga hurgando en la llaga, y durante unos primeros minutos parecía que Donald estaba perdido, pues no contestaba a nada de lo que al principio se le preguntaba sobre políticas públicas concretas a emprender por su gobierno, pero cuando parecía que estaba acabado, Trump comenzó a sacar todos los trapos sucios de la Sra. Clinton, incluyendo un as en la manga que le dio muy buen resultado, cuando acusó a ésta de destruir 33.000 correos electrónicos que eran prueba documental en un proceso judicial siendo secretaria de Estado. Esta revelación puso a la Clinton en muy mal lugar, pues ella no sabía qué responder, tratando de echar balones fuera con expresiones tales como ¨cometí un error¨, ¨no hay pruebas¨, y ante la gravedad de los hechos y la escasa fiabilidad de sus respuestas un sector del público le gritó y abucheó, debiendo ser llamado al orden.

Desde este momento el debate fue desastroso para Clinton, y Trump manifestó que si él llegara a ser presidente pondría un fiscal especial para investigar el caso de la destrucción de los correos, añadiendo que ¨el F.B.I. y la Administración de Justicia la perdonaron, pero yo no, y si llego a presidente haré lo posible para que acabe en la cárcel¨.

Viéndose acorralada la ex primera dama, trató de contra-atacar presentando una imagen de Trump como una persona horrible para todo el pueblo americano, ¨no solo contra las mujeres, también contra los inmigrantes, los musulmanes…¨, pero esta táctica no le salió bien, porque entonces Trump, tras reiterar que respeta a las mujeres sacó a relucir presuntas agresiones sexuales cometidas por Bill Clinton contra cuatro mujeres, las cuales estaban en la sala donde se estaba retransmitiendo el debate. Trump destacó cómo una de ellas, tras haber sido violada por el Sr. Clinton, había sido humillada y despreciada por Hillary, de manera que en pocos minutos se vieron en pantalla todas las miserias de la dirigencia de la clase política estadounidense, y el debate, más que una disputa política, parecía un culebrón típico de los ochenta o noventa como las series ¨Dallas¨ o ¨Dinastía¨.

A mediados del tiempo del debate fueron interrogados los candidatos por los temas más polémicos, tales como la islamofobia, el terrorismo islámico o la guerra de Siria. Así, una mujer musulmana se levantó para agarrar el micrófono y preguntarle a Trump y a Clinton qué harían ellos para tratar de resolver el problema de la islamofobia, a lo que contestó Trump diciendo que ¨la islamofobia es una pena, pero los musulmanes deben denunciar y colaborar cuando vean correligionarios cometiendo actos terroristas. Tenemos un gran problema y es el terror islámico radical.¨ Esta contestación fue muy apreciada por el público en general al describir un problema real que preocupa mucho al estadounidense, mientras que la Sra. Clinton respondió a la pregunta con tópicos y con cierto voluntarismo que provocaron que el público percibiera que realmente no va a tratar ese problema debidamente porque ella tiende a sustituir la realidad por sus propias fantasías, pues dijo:

¨Hemos tenido muchos musulmanes desde George Washington; la visión de mi país es que todos tienen cabida si trabajan. Es peligroso entrar en retórica demagógica sobre musulmanes. (…) Ellos quieren sentirse parte de la seguridad nacional y yo lo quiero ver.¨

A continuación le preguntaron a Trump si es correcto que él manifestara que si ganaba las elecciones cerrarían las fronteras de los Estados Unidos para los musulmanes, a lo que contestó:

¨Yo no llamo a la prohibición de entrada, sino a la filtración extrema; solo personas que puedan ser confiables pueden entrar en nuestro país¨ ¨Con todos los problemas que tiene nuestro país yo no quiero que me vengan millones de gentes de Siria que no conocemos y desconocemos las actitudes que puedan tener en nuestro país.¨

Además, Trump aprovechó la pregunta para tocar el tema de los efectos adversos de la inmigración descontrolada: ¨Gracias a Hillary Clinton tentemos muchos criminales, muchos asesinos en nuestro país¨;  a lo que la Sra. Clinton contestó con razonamientos muy pobres, citando a una película de Spilberg para reforzar sus argumentos, y ofreciendo la película como una prueba histórica.

Más patética si cabe fue la argumentación de la ex primera dama sobre la guerra de Siria, pues culpó al gobierno sirio, a Rusia y a Irán de todas las matanzas perpetradas en aquel país árabe, omitiendo la masacres de los yihadistas, y por si esto fuera poco, la Sra. Clinton tuvo la desvergüenza de decir que ¨Rusia no lucha contra el Estado Islámico, sino contra los rebeldes democráticos¨, a lo que contestó Trump diciendo que a él no le gusta Al Assad, pero ¨los rebeldes son peores que el gobierno de Siria, y reciben apoyo de Obama. Hillary quiere luchar por unos rebeldes que ella desconoce quiénes son, pero Rusia, Al Assad e Irán están matando al Estado Islámico.¨(…) Debemos atacar al Ejército Islámico, no al gobierno sirio. El principal problema que tengo con la estupidez de nuestra política exterior es que los líderes del Estado Islámico siguen ahí. Nuestros líderes son tan estúpidos que le dicen al Estado Islámico una semana antes que los van a atacar, y cuando llega la hora de atacar, el Estado Islámico ya se ha ido de la ciudad que dijimos que íbamos a atacar.¨

La última pregunta selló más el lamentable espectáculo que dio Hillary Clinton, dado que habiendo sido interrogados por un espectador inteligente que les preguntó qué cosa buena veían en el adversario contrario, la Sra. Clinton,- pese a que el presentador iba a darle a Trump la palabra primero-, se abalanzó sobre el micrófono para contestar primero y no dio una respuesta muy deportiva ni educada, pues dijo que lo mejor de Trump eran sus hijos, lo que puede interpretarse como que ella no ve nada absolutamente positivo en Trump como persona, en tanto que él la alabó públicamente diciendo que ella es muy tenaz y luchadora, lo que puede ayudar a Trump a remontar algún punto de la popularidad perdida entre el sexo femenino.

En definitiva, si Trump mordió los anzuelos que le dio Clinton en el primer debate, y reaccionó con arranques violentos como un niño pequeño, en este segundo la acorralada fue Hillary, y al final ésta dio un espectáculo lamentable, convenciendo a muchos televidentes del completelly disaster (la expresión favorita de Donald Trump) que ha sido la política interior y exterior de los demócratas.

A pesar del éxito del debate, los analistas políticos predicen que aunque Trump ha ganado esta batalla, perderá la guerra y Hillary ganará las elecciones, sobre todo por haber sido estereotipado por sus comentarios despectivos de género, pero a mi entender no es éste el único factor a tener en cuenta que pudiera hacer bajar la enorme popularidad de Trump y su éxito de hombre fuerte anti-establishment. Entre otros factores a tener en cuenta, el recuento lo hace la misma empresa de Barcelona que computa los votos en España. Aun así, la Sra. Clinton dijo que Putin ha lanzado ciberataques contra el sistema informático electoral estadounidense para que gane Donald Trump. Que cada cual saque sus propias conclusiones.

trump