Los máximos responsables de los Servicios de Información de la Policía y de la Guardia Civil han manifestado este jueves su preocupación ante el desafío que supone para la seguridad de España la llegada masiva a Europa de personas que están huyendo de los conflictos en Oriente Medio.

Lo denuncian de una forma bastante tímida, seguramente para evitar ser denunciados por «incitar al odio racial» o para no tener que sufrir extraños accidentes como el arzobispo Cañizares, pero aún así su denuncia está clara. Mucho nos tememos que el peligro que denuncian pronto se hará realidad.

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