El que fuera primer ministro de Malasia hasta febrero de este año, Mahathir Mohamad, ha publicado un hilo en Twitter de 16 mensajes en los que lejos de condenar el ataque terrorista en una iglesia católica de Niza, lo ha justificado. “Los musulmanes tienen el derecho a estar enfadados y a matar millones de franceses por las masacres del pasado” es alguna de las salvajadas que ha proferido el político malayo.

Una última reflexión: ¿existe el islamismo moderado? Si lo conocen, háganoslo saber.

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En ese hilo de tweets, acaba diciendo: “Desde que vosotros habéis culpado a todos los musulmanes y a la religión musulmana de lo que ha hecho una persona enfadada, los musulmanes tienen todo el derecho a castigar a los franceses. El boicot no puede compensar todo lo malo que han hecho los franceses estos años”.

Nota de DN: El hombre que ha justificado el reciente asesinato de franceses por parte de terroristas islamistas ha sido… ¡primer ministro de un país musulmán durante más de 23 años!, o sea, un miembro del establishment del mundo islámico, no un cualquiera. 

Aunque los europeos son cada día más conscientes de la grave amenaza que supone la creciente islamización de Europa, se hace imprescindible reaccionar, haciendo ver a nuestras actuales élites gobernantes traidoras que facilitan la creciente inmigración islamista masiva hacia nuestros países (a la vez que destruyen nuestra economía, imponen la ideología de género a través de su ingería social, la destrucción de la familia, la censura a la libertad de expresión, el aborto o los confinamiento masivos), que no estamos dispuestos a transigir más, que Europa es nuestra tierra y la vamos a defender ante cualquier amenaza exterior e interior, ya sea islamista, virológica, climática o de cualquier otra índole. 

También es momento de recordar a los invasores islamistas y a los dirigentes de sus países de origen que, por muchas amenazas o advertencias que nos lancen referentes a nuestro estilo de vida: modas, usos, costumbres y creencias, jamás aceptaremos injerencias en las mismas por parte de otras civilizaciones ajenas a la nuestra.

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