Ha muerto otro militar español en el extranjero defendiendo los intereses de la OTAN, de Estados Unidos y de Israel. En esta ocasión ha sido el cabo Francisco Javier Soria Toledo, muerto por el impacto de un proyectil israelí caido sobre la garita de centinela en la que estaba vigilando.

La situación en la zona es curiosa. Por un lado está Israel, país al que nos presentan como «el escudo de Occidente contra el islam» y al que, por lo tanto, hemos de ofrecer toda nuestra ayuda. Pero de repente, de la nada, aparece en la zona Al Qaeda-ISIS, un ejército formado por decenas de miles de integristas islámicos, reclutado, financiado y armado no se sabe aún por quién, aunque todo apunta a las teocracias islámicas de Oriente Medio (aliadas de Estados Unidos y de Israel)

Pero este ejército islámico no ataca a Israel sino que, curiosamente, ataca a los enemigos de Israel. Es el régimen nacionalista árabe anti-islamista sirio de Bashar al Assad, junto con sus aliados libaneses de Hezbullah, los que están dando la cara frente a los terroristas de Al Qaeda-ISIS. No sólo eso, resulta que, cada vez que el ejército sirio tiene acorralados a los terroristas, de repente aparecen las fuerzas aereas de Israel a echarles un cable. El propio Assad ha declarado que «Israel es la fuerza aerea de al Qaeda» (http://www.europapress.es/internacional/noticia-assad-acusa-israel-apoyar-qaeda-operaciones-siria-20150126043522.html)

No es la primera vez que esto ocurre. Al Qaeda ya fue un gran aliado de la coalición Estados Unidos-Israel-Arabia Saudí durante la guerra de Afganistán en los años 80, durante la guerra de Kosovo en los 90 y en la guerra de Libia que acabó con Gaddafi hace pocos años. Incluso atentados como el del 11-S o el 11-M, atribuidos a Al Qaeda, han beneficiado la política internacional de Estados Unidos y de Israel.

¿Y qué pinta el ejército español en medio de todo esto? absolutamente nada. Con el agravante de las circunstanacias de la muerte del cabo Soria, que siguen sin estar nada claras. Israel conocía perfectamente las coordenadas del puesto de la FINUL (Fuerza Interina de Naciones Unidas para Líbano) en el que estaba el militar español, por lo que se hace muy difícil pensar que fue un error. Además, el ejército israelí suele avisar a la FINUL de estos ataques, pero en esta ocasión no lo hizo. Los israelíes ni siquiera respetaron el alto el fuego pedido por la FINUL para evacuar el cuerpo del militar, y eso que habían sido oficialmente avisados de que había un herido español. Aún así, reanudaron los ataques y el equipo médico que tenía que sacar al militar español de allí tuvo que permanecer refugiado durante tres horas. Desde DN pedimos al gobierno español una investigación que aclare lo sucedido.

Desde DN también denunciamos la reacción de la repugnante derecha española, insistiendo en que, a pesar de esta muerte, las tropas españolas deben seguir apoyando a Israel en la zona.  Y hablan del militar muerto como víctima del «fuego amigo» ¿amigo de quién? que les pregunten a los americanos por el «amigo» israelí. Que les pregunten sobre el asunto Lavon en los años 50, cuando agentes israelíes pusieron bombas en instalaciones americanas en Egipto para hacerlas estallar y culpar luego a los egipcios. Que les pregunten sobre el barco USS Liberty, atacado por aviones israelíes el 8 de junio de 1967, provocando 34 americanos muertos y 171 heridos. Que les pregunten por los asuntos de espionaje en Estados Unidos por parte de los sionistas Johnatan Pollard y AIPAC. Y algún día habrá que investigar también el papel de Israel en los sucesos del 11 de septiembre de 2001.

Por último, desde DN pedimos el retorno a casa de las tropas españolas que están en Líbano defendiendo unos intereses que no son los nuestros. Pedimos que esas tropas sean enviadas a nuestra frontera sur a proteger la entrada de inmigrantes ilegales y la seguridad de Ceuta, Melilla, Canarias y todo el litoral sur español.