El diario británico The Independent, uno de los más leídos mundialmente, nos sorprendía ayer con un artículo el cual nos dejó boquiabiertos. Nos relataba varios casos de pederastas famosos y nos atenuaba su delito llamando a la pedofilia «una orientación sexual».

El diario en cuestión citaba el caso de uno de estos pederastas que incluso practicaba la necrofilia.

Son muchos ya los medios de información que están introduciendo este término en la psique de la gente como normalizándolo para darnos paso a la legalización de tan abominable práctica.

Como ya hemos citado el tema desde Democracia Nacional en otras ocasiones, creemos que los países europeos en los cuales el Marxismo Cultural ha calado más profundamente, serán los primeros en legalizar la pedofilia, librando de penas de carcel a estos criminales. Inglaterra será uno de los pioneros en este tema, y leyendo a sus grandes medios de información no nos cabe la menor duda. Holanda, tras legalizar la prostitución y las drogas también participarán en este contrarreloj.

Una vez más, los países frontera, los del sur de Europa, debemos actuar como faro de occidente y exigir a nuestros países hermanos que no solo rechacen esta nueva corriente que nos quiere imponer el gran enemigo de Europa, sino que la condenen aun más enérgicamente penando con cadena perpetua a quien cometa este tipo de delitos e incluír pena de muerte para aquellos que cometan infanticidio o causen suicidio en los niños afectados por abusos, como es el trágico caso de Jordi, un chico de 17 años que se quitó la vida como consecuencia de los abusos sexuales a los que fue sometido por parte del ex concejal del partido político Esquerra Republicana (ERC), Joan Andreu Rodríguez Serra, durante los años 2010 y 2011.

 

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A continuación, el artículo traducido de The Independent:

 

No todos los pedófilos son malas personas. Necesitamos tener sentido de la proporción

Los internautas reaccionaron negativamente por el artículo "Soy un pedófilo, pero no un monstruo", de Todd Nickerson.

Los internautas reaccionaron negativamente por el artículo «Soy un pedófilo, pero no un monstruo», de Todd Nickerson.

La opinión pública se ha escandalizado por las acciones perpetradas por Jimmy Savile (violador y necrófilo con más de 400 denuncias a sus espaldas) que recientemente han salido a la luz y, sin duda, no les falta razón: se ha aprovechado sexualmente de jóvenes que le admiraban mientras las autoridades miraban hacia otro lado.
Desde aquello, se ha acusado a varios famosos, tanto por hechos pasados como presentes, y se espera que tengan que pagar por décadas de abusos sexuales. Además, se cree que hay muchas más víctimas que seguirán denunciando actos pasados.
Sin embargo debemos tener sentido de la proporción. No debemos volvernos histéricos y empezar a ver pedófilos por todas partes. Sí, los pedófilos existen, pero son pocos y no todos son pederastas. Es posible sentirse atraído por los niños como una orientación sexual sin llegar a dar rienda suelta a sus deseos.


Cuando estudié el grupo Paedophile Information Exchange en la década de los 80, muchos de sus miembros admitieron sentir atracción sexual hacia niños, pero los habían reprimido. Algunos consiguieron trabajos de profesor o trabajador social y, de esa manera, podían estar cerca de niños sin ser sospechosos de pederastia. Sus perfiles psicológicos encajan con los de personas amables y racionales que no harían daño a nadie.


Sí bien no todos los pedófilos son pederastas, muchos casos de pederasta tienen, como protagonista, a no pedófilos (alrededor del 80%), incluidos familiares o amigos. En Reino Unido, la edad legal para tener relaciones consentidas es injustamente de 16 años. Muchos hombres admiten haberse sentido atraídos por chicas menores de esa edad, sin plantearse aprovecharse de ellas.
Otros son más laxos, como Jhon Peel, que afirmó que nunca comprobó el DNI de las seguidoras que hacían cola para conocerla tras su programa de radio». Sin embargo, no se considera que este tipo de hombres sean pedófilos a menos que se sientan atraídos exclusivamente por niños, ni deberíamos considerar pedófila a una profesora por tener una aventura con un alumno, aunque su comportamiento haya sido inmoral.


Quizás deberíamos dejar de buscar pedófilos bajo la cama y centrarnos en esclarecer qué criterios tener en cuenta en los casos de abuso de individuos que se encuentran en situaciones vulnerables, ya sea por la edad o por otras circunstancias.


Fuente:

http://www.independent.co.uk/voices/not-all-paedophiles-are-bad-people-we-need-to-have-a-sense-of-proportion-a6704201.html

 

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