De ahora en adelante, los grupos de inmigrantes que estén buscando posibles objetivos de violación como en éstos últimos meses, se encontrarán con las chicas equivocadas.

Con el flujo contínuo migratorio de musulmanes, la cantidad de violaciones en Suecia tan sólo en el último año ha doblado su número, al mismo tiempo que otros países, en plena «crisis de refugiados» han visto también incrementado el número de asaltos sexuales, a la vez que aumentan también los avisos de pandillas de «refugiados» ocupando zonas públicas.

Ante ésto, algunos grupos de mujeres de entre la población han decidido tomar partido, y pasar a la acción por ellas mismas.

Diversos medios, como Dailymail, se han hecho eco de la aparición de un grupo de chicas, las cuales han empezado a patrullar las piscinas en traje de baño, ante la alerta suscitada por ataques y asaltos de índole sexual ocurridos previamente en las piscinas públicas de Suecia.

Ésta «Guardia Anti-acoso» usará todo medio a su alcance, en legítima defensa de aquellas mujeres que puedan ser objetivo de éstos asaltantes extranjeros, con la idea de denotar que éstas no son platos de buffet con los que puedan deleitar sus perversos hábitos.

Siri Bernhardsson, una joven asistente social, es la líder de ésta especial patrulla. Ella explica ante los medios, que no son pocas las mujeres que les han escrito detallando el horror de los asaltos sufridos por inmigrantes, los cuales suelen suceder en lugares públicos; «…Conciertos, estaciones de tren o piscinas públicas» tal como describe Siri.

Actualmente, la Policía conoce sobre éstos incidentes, y sabe a ciencia cierta que el número de estos asaltos sexuales a mujeres europeas asciende a cifras muy altas. Muchos de ellos pasan sin pena ni gloria, pues las mujeres víctimas de ellos no dan aviso ante el temor de posibles represalias por parte de los violadores, cuando como viene siendo costumbre por los órganos de la Justicia, dejen a los agresores libres y sin cargos, siendo la mujer denunciante un fácil objetivo para éstos depredadores.

Siri continúa explicando que, cifras tan altas ocultadas por la Policía, y casos como el de la colegiala alemana atacada por «refugiados» sirios, la mujer de 54 años acosada por un «buscador de asilo» y el caso del niño de 10 años que fue brutalmente violado a manos de un musulmán en Austria, son motivos más que suficientes por los que ellas patrullan y seguirán patrullando.

Al menos 34 centros centros de asilo han abierto sus puertas en Kalmar, Suecia, una ciudad de tan sólo 36.000, en la cuál se esperan 6.000 nuevas llegadas, y se esperan aún más debido a la masiva ola de inmigración que prevé golpeará Europa en éste 2016.

Mientras la policía y prensa suecas se apuran en ocultar los crímenes y violaciones cometidas por estos inmigrantes musulmanes, nacen estos grupos de ciudadanos para la defensa de los europeos.

Muslim Refugees Looking For Someone To Rape, Run Into The WRONG Girls