El diario El País ha publicado el siguiente artículo titulado: «Con lo bien que estábamos cuando la Tierra era plana». Un extraño artículo para un diario «progre» que ha colaborado lo indecible en la expansión del indigenismo, le leyenda negra y el antiespañolismo pero en fin… Nunca es tarde si la dicha es buena. Vale la pena leerlo.
El Ayuntamiento de Los Ángeles ha decidido cambiar de denominación la festividad del Día de Colón —el segundo lunes de octubre— por la de Día de los Pueblos Indígenas. Tras una intensa discusión, pero una votación abrumadoramente partidaria de eliminar el nombre de Colón, el Consistorio ha tomado esta decisión basándose en la muerte de indígenas a manos de las tropas que viajaban con el navegante y la posterior dominación española —Portugal parece que, por ahora, se libra— del continente americano. Son cosas que pasan cuando se aplican a la historia un kilo de corrección política y cuarto y mitad de ignorancia.
El concejal firmante de la medida es Mitch O’Fanell, pero que el lector no se deje arrastrar por los prejuicios culturales fruto de su educación sesgada. A pesar del nombre inglés y del apellido irlandés, O’Fanell pertenece a la tribu Wyandotte de Oklahoma. Tal vez fruto de ese mestizaje —esta palabra sí es políticamente correcta—, O’Fanell y sus compañeros —perdón, pero la imagen inevitablemente evoca un pub y no un tipi, los prejuicios…— han aprobado cambiar solo el nombre pero han dejado el día libre. Lo coherente hubiera sido suprimir también la fiesta. Al fin y al cabo el calendario laboral es un invento occidental, pero tal vez estén preparando el siguiente paso lógico en esta senda ilógica: suprimir los nombres de Los Ángeles y el Estado de California, ambos de indudable origen colonial. Y pedir que la Tierra vuelva a ser plana, que en América todo era paz.
Leer artículo completo: AQUÍ
NOTICIA RELACIONADA:
Nueva York debate se debe retirar una estatua de Colón por ser un posible “símbolo de odio”
Deja tu comentario